ACTIVIDADES DE PREESCRIPTURA: WALDORF FORM DRAWING

Sommaire

Una des las primeras habilidades que esperamos que nuestros hijos desarrollen es la de la motricidad fina y la grafomotricidad para que un día puedan empezar a escribir y leer y disfrutar de ello pero en numerosas ocasiones, las actividades repetitivas acaban aburriendo a nuestros hijos.

Mi segunda hija (2008) cursó el primer curso de primaria aquí en Escocia (el año pasado) y descubrimos que las primeras semanas se dedicaban a aprender las letras y los sonidos de éstas. Hasta aquí bien, lo que no nos gustó es que cada día debían hacer la típica ficha de caligrafía, repitiendo una letra hasta el infinito. Una ficha en el cole y otra ficha en casa como deberes. Mi hija había ya aprendido a leer y escribir en casa porqué era algo que le entusiasmaba. A las pocas semanas de empezar el colegio no quiso volver a leer un libro, ni a escribir, ni mucho menos a hacer las fichas de caligrafía de deberes… Toda su ilusión y curiosidad se desvaneció en cuestión de días pero no es algo irreversible, os aseguro que ahora vuelve a estar contentísima. Os explico cómo lo trabajamos en casa.

 

Para que los niños puedan escribir es necesario que desarrollen primero un seguido de habilidades y adquieran cierto grado de madurez. El fin básico de las fichas de caligrafía es el de mejorar las habilidades motrices finas, en concreto la grafomotricidad. Es decir, el poder hacer trazos suaves y precisos sosteniendo el lápiz correctamente. Pero creedme, hay muchas otras formas para que nuestros hijos desarrollen la grafomotricidad manteniendo su curiosidad intacta. Hoy os voy a presentar una que para mi es muy especial, el Form Drawing o Dibujo de Formas.

 

En los colegios Waldorf, el primer día del primer curso de primaria es un día muy especial. Bien, yo diría que en todos los colegios y para todas las familias, empezar el cole de “grandes” es siempre un momento importante. Los entornos se preparan, hay pequeñas ceremonias (en Waldorf implican rosas, en algunos colegios se emparejan los niños recién llegados con los de un curso superior…) y se respiran toneladas de ilusión en el ambiente. Pues bien, el primer día de primaria en las escuelas waldorf es el primer día en que se presenta la actividad de form drawing. La actividad como tal no tiene misterio, consiste en dibujar unas formas abstractas para practicar las habilidades motrices finas pero, lo que es importante (y me atrevería a decir lo MÁS IMPORTANTE) es la forma en que la actividad se lleva a cabo.

Hay tres puntos clave:

  • implicar el  cuerpo (no sólo la mano y el lápiz)y los sentidos
  • storytelling o contar cuentos/historias
  • dejar reposar la actividad y recuperarla al día siguiente

Voy a poneros como ejemplo la forma que se trabaja el primer día (la recta y la curva) y la forma en que lo he hecho yo en casa para que lo entendáis perfectamente y después os haré un resumen general para seguir haciéndolo con otras formas.

Como he dicho, mimar el ambiente es algo importante pues al final son los pequeños detalles los que marcan una diferencia. En casa nos gusta decorar la mesa con flores u hojas u otros tesoros que hemos recogido en nuestros paseos y cuando vamos a hacer algo nuevo, trato de no olvidarme de mimar un poco el ambiente y traer las flores a la mesa o dejar los materiales que usaremos ordenados de una forma especial o… en fin, cualquier cosita que pueda hacer el espacio algo más especial.

Cuidado el ambiente, es hora de llamar a mis hijos y lograr captar su atención. Al educar en casa, yo me puedo permitir esperar hasta encontrar un momento en que hayan acabado una actividad y estén en “búsqueda” de la siguiente pero si trabajáis en un colegio, muy probablemente no podáis esperar o tengáis que guiaros de una forma u otra por el reloj. Por eso, desde mi punto de vista, es importante empezar con algo que permita captar la plena atención del niño y así éste pueda dejar atrás las actividades que haya estado realizando hasta ese momento. Para ello, el storytelling o contar historias es clave. ¿A que niño no le gusta que le cuenten un cuento? Nos gusta a todos, niños y mayores…

Pues bien, a mi me gusta empezar con un cuento y, siguiendo la idea de Steiner, tenemos que conseguir ligar el cuento con lo que se quiere enseñar. Como os he dicho, las primeras formas que se trabajan son la recta y la curva y os dejo el cuento que yo me he inventado para introducirlas, se llama Los duendes y el vaso de oro (así que empezaría con un: ¿Queréis que os cuente un cuento? Hoy voy a contaros la historia de Los duendes y el vaso de oro…) y dice así:

En un bosque no muy lejano, en el interior de un árbol milenario, a lo alto de una montaña, vivían una tribu de duendes. Eran los encargados de mantener el bosque en paz pues eran famosos por sus buenos consejos y su justicia. Cuando alguno de los habitantes del bosque tenía algún problema con un vecino, un amigo o incluso un hermano, y no lograban ponerse de acuerdo de ningún modo, llamaban a los duendecillos y estos les ayudaban siempre a encontrar una solución que gustara a todos.

Pues bien, un día, el Gran Jefe Oso, muy agradecido por la ayuda que los duendecillos le habían brindado cuando algunos de los osos estaban peleándose por una cueva, les trajo un regalo. ¿Adivináis qué podía ser el regalo? ¡Si! Un vaso de oro… Les trajo un vaso de oro y aquél día empezaron los problemas… Los duendes tenían muchísimos vasos de madera, uno para cada duendecillo, pero desde ese día todos los duendes querían usar el vaso de oro y cada mañana corrían hacia la cocina para poder ser los primeros y coger el vaso de oro para desayunar. Pues bien, os podéis imaginar, los duendecillos estaban cada día más cansados. Se levantaban cada día más y más temprano tratando de poder coger el vaso de oro. Y, como estaban tan cansados, estaban de muy mal humor. Ya no podían ayudar a los habitantes del bosque porque se pasaban el día discutiendo entre ellos.

Un día, uno de los duendecillos ni siquiera se acostó. Se quedó frente la puerta de la cocina toooda la noche para coger el vaso de oro justo en el momento en que salía el sol. Ese día, mientras todos discutían sentados a la mesa, uno de los duendes dijo que no podían seguir así. Ellos siempre habían ayudado para que sus amigos no se pelearan y ahora ellos no paraban de pelearse. Debían encontrar una solución. Y hablando, hablando, la encontraron. Ese día cogieron el vaso de oro y lo usaron como maceta para la plantita más bonita del jardín. Una que hacía flores de colores.

Desde entonces, el vaso de oro y la planta de flores de colores adornan la mesa de los duendes y ellos estuvieron muy contentos pues no sólo pueden ayudar a los habitantes del bosque a resolver sus problemas sino que pudieron resolver los suyos también.

LOS DUENDES Y EL VASO DE ORO, por Nitdia Aznarez

Y hasta aquí el pequeño cuento. Como veis, trato de hacer preguntas e interactuar con los niños para mantener su atención y otra cosa más, cuando nombro el árbol y los duendes, con la mano dibujo una línea recta vertical I, mientras que cuando nombro el vaso de oro, hago una curva como en forma de U.

Después, dibujo una recta y una curva en la pizarra al tiempo que digo recta y curva. ¿Os habéis fijado? Cómo nosotros y el mundo que nos rodea (al tiempo que hago el segundo dibujo).

RECTA Y CURVA

YO Y EL MUNDO

En este momento, les pido si pueden identificar más cosas rectas y curvas: nuestros dedos son rectos pero la punta de éstos es curva. Las patas de la mesa son rectas, el reloj en la pared es curvo… Y salimos a fuera a buscar más rectas y más curvas. Podéis salir al parque, a la calle, al patio… dónde sea pero que implique cambiar de escenario. Así, nos damos cuenta que las rectas y las curvas lo forman todo. Todo puede dibujarse con rectas y curvas.

Aquí acabaríamos la actividad el primer día y la retomaríamos el siguiente. Waldorf da mucha importancia a lo que llaman recall o volver a retomar, recordar. Las actividades se retoman en diferentes días permitiendo no sólo hacer una actividad más larga sino que se estimula también el recordar lo hecho con anterioridad y resumirlo para seguir adelante. Normalmente, las actividades de form drawing se hacen durante 3 días (después os haré el resumen con el orden de presentación) pero en primer curso suelen hacerse en dos días.

Así, el día siguiente retomo la recta y la curva. Para ello, les pido si recuerdan la historia del día anterior (y evidentemente, ellos me la resumen). Esta vez vamos a hacer actividades que impliquen diferentes partes del cuerpo y otro tipo de habilidades (motricidad gruesa, equilibrio, otros sentidos…). Por ejemplo, puedo hacer una curva en el suelo con una cuerda para que los niños caminen sobre ella. Antes les pregunto ¿Qué os recuerda esta curva? ¿Se parece al vaso de oro verdad? Después hago una recta y repetimos. Podemos caminar, gatear, reseguir con las manos, saltar a la pata coja a lo largo de la cuerda… También podemos dibujar la curva y la recta con nuestros cuerpos. Lo importante es practicar de otras formas antes de llegar a las manos y al papel.

 

Y para finalizar, llegamos al form drawing o dibujo de formas. Como veis, antes de que el niño coja lápiz y papel (o ceras y libretas, o el libro de la lección principal, o el material que os apetezca) hemos creado un contexto que va a hacer la actividad más atractiva. ¿Dibujamos duendes y vasos? Las primeras formas (recta y curva) pueden hacerse de forma desestructurada, jugando a hacer patrones o como les apetezca.

 

Después, podemos ir introduciendo el resto de formas, siempre buscándoles un contexto. Por ejemplo, para las siguientes formas (el zig zag y las ondas) yo uso la misma historia de Los Duendes y el Vaso de Oro. El tercer día, les digo: ¿recordáis dónde estaba el árbol milenario dónde vivían los duendes? Estaba en lo alto de una montaña… (y dibujo el zig zag). Y, ¿sabéis qué? Las flores de colores del vaso de oro eran tan bonitas que siempre había alguna abeja volando a su alrededor (y dibujo las ondulaciones).

Podemos inventar nuevas historias o ir buscando conexiones a la que ya contamos. Yo opto más por lo segundo pues así el mundo de los duendes y el vaso de oro se hace cada vez más y más rico al tiempo que mis hijos hacen un trabajo de síntesis al recordarlo.

Hay muchas formas para dibujar y no todas se dibujan en horizontal pero puede que os resulten las más fáciles de introducir inicialmente así que os dejo algunas ideas. Yo dibujo dos formas en la parte central del folio y mis hijos los extienden hacia la parte inferior y superior. En las escuelas Waldorf no se usan rotuladores ni color negro pero en nuestra casa está todo permitido 😉

Más adelante se introducen también figuras radiales, formas para practicar la simetría… pero las dejo para una segunda parte 😉 la verdad es que en las escuelas Waldorf llegan a hacerse formas super complicadas y artísticas. Ahora os hago el resumen de los tiempos y estructuras para incorporar las diferentes actividades:

ESTRUCTURA EN 2 TIEMPOS

Día 1: Presentar la historia o cuento, el adulto dibuja la forma y se practica con otras actividades (lista a continuación)

Día 2: Practicar el dibujo de la forma

ESTRUCTURA EN 3 TIEMPOS

Día 1: Presentar la historia o cuento (el adulto dibuja la forma en la pizarra antes o durante la historia) y se deja reposar.

Día 2: Practicar la forma con otras actividades (lista a continuación) y dibujarla (form drawing). Al mismo tiempo, se presenta una imagen de la siguiente forma (la 2ª) (el adulto la dibuja en la pizarra mientras extiende la historia o explica una nueva)

Día 3: Practicar la siguiente forma (2ª) con otras actividades y dibujarla (form drawing) al tiempo que se presenta una nueva forma (la 3ª)

Así entraríamos en un bucle y el día 4 practicaríamos la 3ª forma con otras actividades y la dibujaríamos en papel al tiempo que presentaríamos (imagen e historia) la 4ª forma.

También os doy algunas ideas de actividades para trabajar las formas antes de llegar al form drawing como tal. Estas actividades os servirán también cuando ya lleguéis a las letras y queráis practicarlas de forma global.

  • Dibujar la forma en la espalda de otra persona
  • Dibujar la forma en una bandeja con arena o harina. Con las manos, con los pies, con la nariz…
  • Usar una pizarra líquida
  • Dibujar la forma con tiza en el suelo y recorrerla caminando, saltando, de puntillas, de talones…
  • El adulto dibuja la forma en una pizarra, el niño la “borra” con un pincel mojado en agua, después la seca con un pañuelo y por último la dibuja él con la tiza. Éste sistema se conoce como wet-dry-try o humedece, seca y prueba.
  • Construir las formas con piezas de madera o de goma eva
  • Hacer las formas con plastilina o cera de abejas para moldear
  • Dibujar la forma en el suelo con una cuerda de saltar y caminar, gatear, reseguir con las manos, saltar a la pata coja, recorrer con los ojos vendados…
  • Dibujar la forma al aire libre, en la tierra, ya sea haciendo un surco con algún objeto o haciendo un montículo de tierra
  • Dibujar la forma con objetos: palos, piedras, hojas, canicas…

¿Qué os parece este sistema para desarrollar la grafomotricidad? Como veis, va mucho más allá y se trabaja de forma global. Esto es común en las llamadas pedagogías alternativas. No importan tanto los materiales o actividades concretas como la forma en que se presentan y se buscan conexiones entre ellas, intentando no fragmentar los conocimientos.

 

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(Soy un poco naïve y me gusta pensar en estos artículos como en pequeñas semillas para generar un cambio más global).