En casa somos muy fan de los juegos de mesa pues nos permiten aprender en familia mientras pasamos un buen rato… pero hay otro tipo de juegos que ocupan un lugar importante en nuestro hogar, los juegos de lógica.
Los juegos de razonamiento lógico harán que nuestros hijos tengan que observar, razonar, inferir, conjeturar, desarrollar estrategias… trabajando así las capacidades básicas del pensamiento matemático.
Hoy os traigo una selección de nuestros favoritos. Os muestro opciones para todas las edades, lo que tiene tener en casa 4 niños de 3 a 12 años… Todos tienen algo en común y es que son juegos a partir de un único jugador. Otro día os enseño nuestros juegos de mesa multijugador pero hoy me centro en los que se pueden jugar en solitario, que ocupan una posición importante en nuestro homeschooling . En casa los tenemos al mismo nivel que los materiales Montessori, materiales estructurados que el niño puede usar de forma independiente. La mayoría son también autocorrectivos (contienen la solución) para que sea el propio niño el que lleve el control del error.
Éste es uno de los primeros juegos de razonamiento lógico y percepción espacial y visual que compramos, hace ya unos cuantos años. Es apto para los más pequeños y sus piezas de madera son muy agradables al tacto (¡y resistentes! han pasado de hermano en heramano y siguen como nuevas).
El librito contiene 48 retos, de niveles de dificultad progresivos, en qué el niño tiene que construir castillos usando todas o parte de las 7 piezas de madera. Es un juego autocorrectivo puesto que contiene la solución a cada reto en la página trasera.
Nuestros hijos lo han usado desde muy pequeños, al principio sin usar el libro de retos, únicamente como bloques de construcción.
Goki es una marca de esas buenas, bonitas y baratas. Sus materiales suelen ser muy didácticos, lúdicos y aptos para todos los bolsillos.
Este juego consiste en un tablero de madera con fichas móviles y unas tarjetas también de madera con los patrones que el niño va a intentar reproducir.
Las fichas únicamente pueden moverse por los caminos (no pueden sacarse) por lo que se practican también las habilidades motrices finas.
Consiste en un soporte con 18 tarjetas de plástico transparente con figuras geométricas y un librito con 100 retos (4 niveles progresivos). El niño tiene que superponer tarjetas para llegar a formar un dibujo concreto. Es también un juego autocorrectivo con las soluciones al final del librito.
Las fichas translúcidas aportan una nueva dimensión puesto que pueden voltearse. Este ha
Este juego reta a nuestros hijos a trabajar sus habilidades espaciales. Consiste en 18 cubos de plástico con las caras en 3 colores diferentes, 2 libros de retos y 2 libros de soluciones (juego autocorrectivo).
Los retos se van complicando y hasta a mi me pica el gusanillo y me pongo a jugar de vez en cuando 😉
Minitablero con varias piezas tridimensionales que tienen que combinarse para lograr ocupar todo el tablero siguiendo las imagen en 2D del librito.
Este nos ha acompañado en numerosos viajes de avión pero sigue siendo todo un reto.
El librito contiene 120 retos de dificultad progresiva y las soluciones. Puede guardarse dentro del minitablero (se cierra con tapa) de forma que cabe todo en un bolsillo.
Este es también un típico y existe en diferentes versiones. En el original las piezas son pequeños coches y vehículos pero se puede encontrar con animales (versión Safari, la que tenemos en casa), edificios… Tiene 40 retos de niveles progresivos y es también autocorrectivo.
Está marcado a partir de 8 años pero si a vuestro hijo le gustan este tipo de juegos, yo lo ofrecería también antes. Nuestra segunda y nuestro tercero, al tenerlo en casa (por el mayor) empezaron a jugar mucho antes.
Las fichas se colocan en el tablero en función de lo dibujado en la carta del reto y el objetivo es lograr que la ficha “principal” pueda salir del tablero por un lugar determinado. El resto de fichas tienen los movimientos limitados por lo que el niño puede ir probando o puede intentar pensar primero para sacar la ficha principal con el menor número de movimientos posible.
Este juego contiene 19 piezas de plástico con las que de tienen que montar caminos ininterrumpidos. Cada carta de reto te dice qué fichas tienes que usar y el niño las va uniendo hasta que no queda ningún camino cortado. En las cartas puede encontrar también la respuesta.
El nivel de dificultad es también progresivo y cada vez los retos son más complicados. Viene con una bolsita para guardar fichas y cartas y ocupa muy poco espacio con lo que de convierte en perfecto para viajes.
Este es sin duda nuestro preferido (actualmente). Es muy divertido tanto para jugar de forma individual como en grupo y al consistir en 60 cartas (de plástico transparente) guardadas en una bolsita, se viene ahora siempre en mi bolso.
Las cartas tienen pintados dos tipos de círculos (uno más pequeño y otro más grande en forma de anillo, con un hueco en el centro) de diferentes colores. Se tienen que ir superponiendo cartas de forma que se completen los círculos de un mismo color (con el pequeñito en la parte central y el anillo envolviéndolo). Se pueden usar dos o mas cartas y estas pueden rotarse, voltearse… Lo dicho, el juego engancha y ahora de viene siempre con nosotros.
Y nada, estos son nuestros preferidos y espero que os sirvan de cara a las Navidades. Se que aún falta mucho pero como cada año me pilla el toro, este me he propuesto ser una “buena madre” y hacerme con todo antes de que esté agotado 😉
Aclarar que los enlaces a Amazon son a mi cuenta de afiliado por lo que si compráis un juego a través de ellos, yo me llevaría un pequeño %. Vosotros pagáis lo mismo solo que Amazon me da entre un 3 y un 10% por haber facilitado la compra. Evidentemente, ganar algo siempre ayuda pero aún así, os animo a que vayáis a las tiendas y toquéis los juegos con vuestras propias manos. Incluso podéis ir con vuestros hijos y que sean ellos directamente los que prueben y juzguen. Es la mejor forma de acertar y si lo hacéis ahora ¡aún no lo relacionan con las Navidades! Nunca me ha gustado mucho todo el consumismo sin medida que parece ir de la mano con las fechas navideñas pero si lo usamos para apoyar a los pequeños comercios, ¡mucho mejor!
Si queréis algunas ideas para hacer juegos caseros, tenéis el juego de la L, el juego de los rascacielos, las construcciones redondas, las construcciones de letras, los pattern blocks… todos sin necesidad de comprar nada 😉